Amalia Domingo Soler

¡LOS GRANDES DE AYER!

Siempre que encuentro en mi camino alguno de esos desventurados que no tiene casa ni hogar, murmuro con profunda tristeza, con inmensa compasión: ¡He aquí un grande de ayer! Para carecer de todo, para no tener un rincón donde cobijarse,…

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